Hace unas semanas tuve un difícil encargo...
Se trataba de adaptar un diseño original de Peggy Porschen a los gustos de la anfitriona: Color chocolate, toffee y blanco, para crear un pastel elegante e impactante, pero que no fuera "ñoño" ni cursi.
Conseguir un chocolate brillante, en la misma gama de colores que el toffee de las flores fue una auténtica locura... pero al final... quedó bonito, verdad?
4 comentarios:
Preciosa y muy elegante!!
Es increible! Una auténtica obra de arte! Me encanta! Uhmmm da penita comerlo :)
Felicidades por este genial trabajo.
Un besote y feliz finde!
¡Divina!!!
Gracias por vuestros comentarios! Quedo bonita... :)
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